El alma española: ¿Gatos o perros?

       La guerra entre los perros y gatos está presente en nuestro mundo desde siempre. Tanto los gatos como los perros tienen sus partidiarios. Yo estoy a favor de este primer grupo, aunque hace muchos años los perros me gustaban igualmente. Sin embargo, después de lo que me había sucedido un día, cambié de opinión.
       Tenía 7 años cuando estaba paseando con mi madre y nos encontramos con nuestra vecina que paseaba su perro. Yo conocía bien a este perro porque a veces jugaba con él en el jardín. Entonces me puse a acariciarle, después empecé a rascarle detrás de sus orejas y de repente sentí sus dientes en mi cara. El perro me murdió la nariz. La vecina se olvidó de advertirme de que al perro no le gustaba este tipo de caricia... A consecuencia de eso hasta hoy llevo una cicatriz que me lo recuerda.
       Después de aquel día dejé de confiar en los perros y simplemente empezaron a asustarme. Gracias a aquel suceso me tendí a los gatos y descubrí mi amor por ellos. Pienso que son mucho más tranquilos y, lo más importante, limpios. Ya no podría imaginarme mi casa sin por lo menos un gato.